Tomacorrientes

son dispositivos esenciales en la infraestructura eléctrica de edificaciones residenciales, comerciales e industriales. Se caracterizan por proporcionar puntos de conexión seguros para enchufar dispositivos eléctricos y electrónicos. Están diseñados para cumplir normativas de seguridad que incluyen protección contra sobrecargas y cortocircuitos, garantizando un uso seguro y confiable. Los tomacorrientes pueden variar en diseño y configuración según el país o región, pero generalmente incluyen contactos metálicos conductores y sistemas de sujeción para asegurar los enchufes. Además, pueden integrar mecanismos de protección adicionales como interruptores de circuito integrados (GFCI) para ambientes húmedos o sensibles.