El cilindro convierte la presión hidráulica suministrada por el equipo portador en movimiento lineal, que se utiliza para accionar el mecanismo de percusión del martillo. Este movimiento de percusión golpea la punta del martillo contra la superficie del material a romper. El cilindro está construido con materiales resistentes y duraderos para soportar las fuerzas de percusión generadas durante el uso del martillo. Está diseñado para soportar condiciones de trabajo exigentes y proporcionar un rendimiento confiable a largo plazo.